Sin preguntar a nadie. Sin solicitar permiso a nadie. Sin
comunicar absolutamente nada a nadie. El día 19 de agosto cuando
abrimos la puerta del despacho, que nuestra sección sindical tiene en la
cuarta planta de la Torre de Química, la empresa encargada de realizar
la “chapuza” de la Torre, había abierto la puerta desde el balcón y había
instalado allí sus máquinas para seguir demoliendo partes de este
edificio.
Nuestra sección sindical ha presentado escrito de protesta ante el
Vicerrectorado de Infraestructuras, por lo que creemos un auténtico
abuso de las empresas que trabajan para la ULL y de algunos cargos
políticos de este equipo de gobierno (sin responsabilidad
administrativa) que se manejan “como Pedro por su casa” aunque no lo
sea. En este escrito hacemos responsable a la ULL de los desperfectos y
pérdidas que se hayan podido ocasionar por el allanamiento ilegal de la
oficina de una sección sindical.
Los trabajadores que tenemos la desgracia de trabajar en la parte
trasera del Edificio Central y la Torre de Química, estamos hartos de
soportar las incomodidades de las mil y una obras que se desarrollan a
la vez. Hartos de ruidos, de tierra, de basuras acumuladas en cualquier
esquina, de camiones, de grúas, de que nos corten el paso cada día por
un sitio diferente, de escuchar silbidos e improperios a las estudiantes
que no les queda más remedio que pasar por el medio de las obras, etc.
El pasado viernes el Rector de la Universidad de La Laguna
volvió a visitar las obras del Paraninfo universitario, empeñados como
están en organizar en él el acto de apertura de curso, aunque todo
parecer indicar que lo tienen difícil. Hasta aquí todo normal, nada
desentona con la “virtud” principal de este equipo de gobierno: la
improvisación. Pero no se le ocurrió hacer una visita para interesarse
por los trabajadores afectados (por ejemplo los de mantenimiento o los
de la biblioteca) tras dos largos años de convivir con la incomodidad, el
ruido y la basura.
Todo vale con tal de enseñar el Paraninfo. De lo demás ya
hablaremos más tarde.
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