¿Alguien podría explicarnos a qué responde la resolución del 9 de
junio que modifica, 13 días después de la publicación de la original, la
composición del tribunal calificador para la plaza de asesor
psicopedagógico?
En ambas aparece el mismo tribunal nombrado por el Rector
pero cambiando la titularidad y la suplencia. No ha renunciado ninguno
de sus miembros y, sin embargo, por primera vez en la historia, se
cambia la titularidad y deja como suplente a la persona que desarrolla
exactamente las mismas funciones de la plaza que se convoca.
¿A alguien no le cae bien el compañero que hasta ayer era titular
de ese tribunal? ¿Hay algún motivo para castigarlo o se trata
simplemente de intentar ponerlo en evidencia y que alguien piense que
se cuestiona su profesionalidad?
No cuestionamos la valía del compañero funcionario que antes
estaba como suplente, pero sinceramente no entendemos los motivos
del cambio. ¿Qué se esconde detrás de esta insólita resolución? ¿Alguien
quiere acaso, cuando se da la casualidad de que ambos son miembros
del grupo claustral EUPAS, de echarlos a pelear entre ellos o
simplemente se trata de que nos pongamos a pelear laborales y
funcionarios?
¿Alguien conoce alguna enemistad manifiesta entre el compañero
Carmelo y algún dirigente del entorno Universitario?
Hablando de tribunales y chapuzas, ¿puede alguien respondernos
cómo, para la selección de un aparejador para la Unidad Técnica, la
Universidad no designa a la arquitecta, jefa de ese servicio, y sí al
director de secretariado, profesor de la E.U. de Arquitectura Técnica?
¿Qué quieren decir desde el Rectorado con estas decisiones? ¿Qué los
laborales de la ULL, incluso los que tienen puestos de responsabilidad,
no servimos para un tribunal de selección o de calificación para plazas
similares o inferiores a los puestos que ocupamos, o simplemente que
no servimos para nada?
Cada cual que saque sus conclusiones pero, para nosotros, y
siendo muy recatados y mesurados en los calificativos, estos hechos
son cuanto menos una CHAPUZA.
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